73. Basta.

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23 de Junio de 2009 

Estaba en casa, sola. Asi que aproveché y me senté a escribir alguna de mis historias. Esas que recuerdo, y me divierten por lo fallidas que fueron, por los constantes desencuentros. Esas en las que no me encuentro a mi misma ¿Cómo iba a encontrarme con alguien? Escribí, conté las partes graciosas, exagerando un poco el tono cómico, me gusta reirme de mi misma. Cuando terminé de escribir lo revisé, chequee la ortografía (odio las faltas de ortografía, pero eso no quiere decir que no se me escape alguna cada tanto!), lo corregí… y lo publiqué. Un rato más tarde, volví a entrar a ver si alguien había leído, si había comentarios, y me encontré con una sorpresa no tan grata. Me encontré con esto. 

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1. El Viajero – 23 Junio 2009 [Edit]

Basta, tengo una puntería… Basta. enserio. 

Responder

 

 

Me quedé muda. Miraba y miraba la pantalla tratando de entender. ¿Era él? ¿De verdad era él? Obviamente entré a verificarlo, y sí, era su mail. Era él. ¿Y ahora? Yo sabía que este momento iba a llegar, pero ¿qué tenía que hacer? ¿Tenía que llamarlo? ¿Decirle algo? ¿Dejar de escribir? ¿Pedirle disculpas? ¿O decirle que era mi vida, que no se metiera? No, ya era tarde para eso. Pero estaba paralizada, pensando y pensando qué hacer. ¿Esto es todo? ¿Se terminó acá? ¿No me va a querer ver más? ¿No voy a poder escribir más? Una mezcla de bronca, odio, vergüenza, culpa, sazonado con la sensación inefable de perder algo importante, por un lado o por el otro. No podía dar un paso, ni separarme del monitor. Todo estaba pasando por ahí. Pensé y Pensé y pensé. No pude llamarlo. No me animé a hablar. Lo único que pude hacer fue escribir. Y escribí esto. Traté de contar lo que estaba pasando, de entenderlo yo misma a través de mis letras, como venía haciendo hasta ahora. De entenderme. De decidirme. De escuchar (o leer) opiniones. Aunque ya tenía un decisión tomada, pero me costaba ponerla en práctica, todavía necesitaba un tiempo para pensar. Me sentía una tarada. Tendría que haber levantado el teléfono y hablar con él. Escuchar su voz. Pero no sabía si estaba preparada para escucharlo enojado, odiándome. Yo lo sabía y me había estado haciendo la boluda. Y ahora no podía enfrentarlo. Pero algo le tenía que decir. Así que hice lo más cobarde… contesté su comentario. 

 

 

2. …(des)encontrada… – 23 Junio 2009 [Edit]

 

Lo estoy pensando. Leé el proximo. Aunque en realidad ya lo leiste.    

No sé qué decirrrrr 

Vos sabés que ***.  

yo